Los productos plásticos se han convertido en una parte integral en casi todas las áreas de la vida. Por buenos motivos. Los envases plásticos prolongan la vida útil de los alimentos y las piezas de plástico en los automóviles reducen su peso y las emisiones de CO2.
En medicina, los plásticos aseguran los máximos estándares de higiene y hacen que los productos médicos sean seguros. A pesar de sus muchas ventajas, esta importante materia prima se ha desprestigiado desde hace algún tiempo debido a los residuos plásticos que contaminan regiones enteras y flotan en enormes alfombras en los océanos del mundo. Pero este problema puede ser resuelto.
El concepto de «economía circular» juega un papel central en esto. Se ha convertido en un tema candente en el K 2019, la feria más importante del mundo de plásticos y caucho que se celebrará del 16 al 23 de octubre de 2019 en Düsseldorf, Alemania.
El concepto de economía circular es bastante simple: una vez utilizada, una valiosa materia prima puede procesarse al final de su vida útil y reutilizarse para crear un nuevo producto, en un bucle infinito. Si bien algunos materiales tienen limitaciones que no lo permiten, existe una amplia gama de materiales poliméricos que son perfectamente adecuados para este enfoque. Una economía circular reduce dramáticamente el desperdicio y también protege el recurso del petróleo crudo, ya que siempre que los nuevos productos estén hechos de plástico reciclado, no hay necesidad de usar materiales crudos, es decir, sin uso previo.
Hace unos setenta años, los plásticos se convirtieron en un producto masivo. La Universidad de California estima que desde entonces se han producido aproximadamente 8.300 millones de toneladas de plásticos. Especialmente a raíz del fuerte crecimiento de la población en muchas partes del mundo, las tasas de producción de plásticos se han disparado en los últimos tiempos.
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La encuesta muestra que las cifras aumentaron considerablemente: de 2 millones de toneladas de plásticos producidos en 1950 a 348 millones de toneladas en 2017. En consecuencia, hemos sido testigos de un aumento sustancial de los residuos plásticos y nos enfrentamos a una pregunta urgente: cómo gestionar los residuos plásticos razonablemente. Dos problemas están en la raíz de este complejo desafío: la basura y el uso ilimitado de los recursos, que no solo dañan el medio ambiente, sino que también frenan el crecimiento económico.
Todos los expertos están de acuerdo en una cosa: el cambio global sostenible y la implementación exitosa y permanente de una economía circular requiere apoyo y cooperación a lo largo de toda la cadena de valor, desde el fabricante del material hasta el consumidor final. El comportamiento sostenible comienza en el hogar y en la escuela.
Las personas deben conocer el valor de los plásticos en todas las nacionalidades, grupos de edad y grupos sociales. Pero un alto nivel de compromiso de políticos y legisladores también es esencial. El proteccionismo, que solo toma en cuenta los propios intereses nacionales y un número limitado de influencias relacionadas con la política comercial, no ayudará a implementar medidas apropiadas ni promoverá un proceso de replanteamiento general.
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Algunas iniciativas positivas ya están en marcha: los Estados miembros de la Unión Europea están obligados a alcanzar una tasa de recolección del 90% para botellas de plástico desechables para 2025. Sin embargo, se requieren medidas mucho más tangibles, como el establecimiento de márgenes para el uso de material reciclado en producción o definiendo una cantidad fija de electricidad que debe ser generada por la incineración de residuos plásticos.
En K 2019 en Düsseldorf, el tema de la gestión del reciclaje no solo cubrirá una gran cantidad de espacio en los stands de los expositores, sino que también se destacará en el programa de apoyo. Por ejemplo, la economía circular será el tema dominante en la presentación especial «Plastics Shape the Future» organizada por PlasticsEurope, y el VDMA organizará el «VDMA Circular Economy Forum» para K 2019. En las puertas de entrada a la feria, los «puntos de interés de la economía circular» atraerán la atención de los visitantes comerciales hacia este tema y señalarán las exposiciones relevantes en los diversos salones.
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