La empresa Raízen, licenciataria de la marca Shell en Brasil, Argentina y Paraguay y reconocida como la principal productora mundial de etanol de caña de azúcar, está evaluando la posibilidad de construir una planta para la fabricación de biojet o combustible sostenible de aviación (SAF, por sus siglas en inglés) en territorio brasileño. Esta iniciativa, revelada por el vicepresidente de trading, Paulo Neves, en una entrevista con Bloomberg News, responde a la visión estratégica de la compañía y a la búsqueda de nuevas oportunidades en el mercado de energías renovables.
Según Neves, existe una ventaja económica significativa en producir este tipo de combustible en Brasil, dado que el proceso requiere grandes volúmenes de materia prima. Además, señaló que el costo de exportación del producto final sería considerablemente más bajo en comparación con el envío de etanol para su conversión en combustible de aviación en el extranjero, una afirmación que destaca el potencial competitivo del país en este sector.
Si bien la demanda potencial de combustible sostenible de aviación supera actualmente la capacidad de producción de Raízen, la compañía está en las primeras etapas de planificación. Se ha establecido una asociación con un proveedor de tecnología y se están llevando a cabo discusiones para determinar la escala del proyecto. El CEO de Raízen, Ricardo Mussa, compartió previamente la ambición de la empresa de convertirse en líder mundial en este mercado emergente.
A pesar de estos planes prometedores, aún se deben considerar diversos factores, incluida la viabilidad económica de la empresa. Neves destacó que una planta brasileña competiría en el mercado global con instalaciones ubicadas en países que ya cuentan con incentivos fiscales establecidos. Esta evaluación meticulosa es crucial para garantizar el éxito a largo plazo y la sostenibilidad del proyecto.
La adopción de combustible sostenible de aviación representa un avance significativo en la búsqueda de alternativas más limpias y sostenibles en la industria aérea. Aunque aún se encuentre en sus etapas iniciales, la iniciativa de Raízen refleja un compromiso con la innovación y el desarrollo de soluciones que contribuyan a la reducción de emisiones y al cuidado del medio ambiente.