La empresa de genética de semillas Nuseed está realizando una importante apuesta en el mercado brasileño con el desarrollo de nuevas variedades de caña de azúcar, especialmente adaptadas para áreas con condiciones climáticas desfavorables, según informó el medio local Globo. Con una inversión de R$ 75 millones, U$S 15 millones al tipo de cambio vigente, la empresa busca impulsar la producción de biocombustibles en suelo brasileño, aprovechando al máximo las áreas menos fértiles y con escasez de lluvias.
La ‘caña energética’ se destaca por su mayor contenido de fibras, lo que la convierte en una opción ideal para la producción de bioetanol y bagazo, a pesar de tener un contenido de azúcar menor en comparación con la caña de azúcar convencional.
Nuseed incursionó en el mercado de la caña energética el año pasado al adquirir el segmento de genética de la empresa GranBio, que es la principal productora de bioetanol celulósico a nivel mundial. La compañía de semillas tiene previsto destinar dos tercios de su financiamiento hasta 2027 a investigaciones de mejoramiento genético, mientras que el tercio restante se invertirá en la formación de equipos especializados.
Según Ricardo Bendzius, director de bioenergía en caña de Nuseed en Brasil, se espera que estos fondos impulsen significativamente la expansión de la tecnología de cultivo de la empresa en el país, con el objetivo de aumentar en 50 veces la superficie dedicada a este tipo de cultivo. Actualmente, la compañía cuenta con dos variedades en el mercado y espera lanzar otras dos nuevas variedades en 2026, además de tener al menos un lanzamiento por año durante los próximos diez años, con el objetivo de alcanzar las 420 mil hectáreas cultivadas para el año 2033.
La estrategia de expansión de Nuseed se enfoca principalmente en regiones como São José do Rio Preto, en el noroeste del estado de São Paulo, donde los suelos pobres y la escasez de agua presentan desafíos significativos para la agricultura. Sin embargo, gracias a los avances tecnológicos y a la alta inversión en investigación y desarrollo, esta región se presenta como un mercado prometedor para la empresa.
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A pesar de las perspectivas optimistas, la industria de la bioenergía enfrenta desafíos como la baja en los precios del bioetanol y la energía. Aun así, Nuseed confía en que su enfoque en la reducción de costos y el aumento de la productividad será clave para atraer a los clientes. La longevidad de las variedades de «caña energética», que garantizan una producción estable durante ocho zafras (el doble que la caña convencional en ambientes restrictivos), promete reducir significativamente los costos de renovación y mantenimiento de los cultivos.
Aunque existen competidores en el mercado, como el Centro de Tecnología Canavieira (CTC), Nuseed confía en que su innovadora tecnología encontrará su lugar en la industria. Con un mercado aún poco explorado pero con una demanda creciente, la empresa está posicionada para liderar el camino hacia una producción más eficiente y sostenible de biocombustibles en Brasil.
