En el marco de la MESA NACIONAL FORESTO-INDUSTRIAL, un espacio de diálogo establecido a principios de este año, el Consejo Foresto Industrial (CONFIAR) se reunió con funcionarios nacionales para presentar propuestas, demandas y proyectos que buscan el desarrollo de la industria maderera argentina. El objetivo es fomentar la innovación, promover buenas prácticas ambientales y sociales, y facilitar el intercambio de conocimientos y recursos.
Un Patrimonio Forestal Sostenible
Argentina cuenta con aproximadamente 53 millones de hectáreas de bosques nativos y 1,3 millones de hectáreas de plantaciones forestales, de las cuales alrededor del 50% están certificadas bajo estándares de gestión sostenible reconocidos internacionalmente. La foresto-industria argentina se abastece en un 95% de madera proveniente de estas plantaciones. El sector incluye la producción de celulosa y papel, madera y tableros para viviendas y muebles, energía eléctrica y térmica, y diversos productos químicos, todos con una baja huella de carbono y esenciales para la descarbonización de la economía.
Con 13.000 productores forestales y más de 6.000 empresas, la foresto-industria emplea formalmente a unas 100.000 personas y exporta alrededor de 550 millones de dólares anuales. Según la consultora finlandesa AFRY, el valor de la industria forestal mundial crecerá en más de 210 billones de dólares entre 2019 y 2035, lo que representa una oportunidad única para que Argentina se posicione como un jugador principal en el mercado global.
Fortalecimiento del sector y propuestas clave
Mercedes Omeñuka, presidente de la Federación Argentina de la Industria de la Madera y Afines (FAIMA), destacó la tradición de calidad y sostenibilidad de la industria maderera argentina. “Nuestra industria no solo puede satisfacer la demanda interna, sino que también tiene el potencial de expandirse significativamente en mercados internacionales. El desarrollo que planteamos podría impulsar nuestras capacidades productivas, mejorar la tecnología y optimizar los procesos de manufactura”, afirmó Omeñuka.
Por su parte, Osvaldo Kovalchuk, presidente de la Asociación de Fabricantes y Representantes de Máquinas, Equipos y Herramientas para la Industria de la Madera (ASORA), subrayó la necesidad de cerrar la brecha tecnológica entre grandes empresas y pymes. “Es crucial contar con herramientas de financiamiento para que las pymes sean competitivas. Cuando acceden a líneas de crédito con condiciones razonables, invierten”, enfatizó Kovalchuk.
Asimismo, Kovalchuk señaló la importancia de aprovechar los residuos de la industria maderera como biocombustible, aprendiendo de la experiencia europea. Además, manifestó la necesidad de desalentar la importación de maquinaria usada en favor de la automatización, la industria 4.0, la inteligencia artificial y la capacitación del personal.
Propuestas concretas
- Actualización de la Infraestructura Logística: Ampliar la capacidad ferroviaria y desarrollar la infraestructura portuaria para mejorar las exportaciones.
- Mejoras Energéticas para Polos Foresto-Industriales: Mejorar las líneas de transporte eléctrico y promover la inversión en energías renovables como biomasa, solar y eólica.
- Reglamentación: Evaluar y actualizar los reglamentos técnicos para alinearse con las mejores prácticas internacionales y las necesidades del sector.
- Comercio Exterior: Simplificar trámites aduaneros, facilitar acuerdos comerciales internacionales y promover el sector en el ámbito internacional.
- Certificación de Madera Estructural: Crear normativas nacionales específicas y desarrollar un sistema de certificación accesible y confiable.
La madera: un recurso sostenible
La madera es un producto renovable, reciclable y carbono neutro, crucial en un mundo que enfrenta desafíos de crecimiento poblacional y cambio climático. Provee materia prima para viviendas, muebles, papeles, energía y productos químicos, reemplazando productos no renovables. Las nuevas tecnologías, como la nanotecnología y las biorrefinerías, amplían aún más sus aplicaciones.
La industria maderera dinamiza el empleo y las economías regionales, agregando valor a la materia prima proveniente de plantaciones forestales. En la construcción, la madera es un material renovable, reciclable y carbono neutro, con propiedades aislantes superiores y resistencia estructural, contribuyendo a la mitigación del cambio climático.
Participantes del encuentro
Entre los participantes del encuentro se encontraban el Dr. Sergio Iraeta, subsecretario de Producción Agropecuaria y Forestal; Manuel Chiappe, jefe de asesores de la Subsecretaría; y Sandra Panes, directora nacional de Competitividad de la Subsecretaría de Gestión Productiva. Por el sector privado, participaron Mercedes Omeñuka, Román Queiroz y Fernando Couto de FAIMA, y Osvaldo Kovalchuk y Nicolás de Gennaro de ASORA, entre otros representantes de entidades vinculadas a la foresto-industria y universidades.


