El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) anunció recientemente la financiación de 586 proyectos destinados a expandir el acceso a sistemas de energía limpia y aumentar la disponibilidad de biocombustibles producidos localmente. Este esfuerzo, respaldado por la Ley de Reducción de la Inflación impulsada por el gobierno de Biden, representa una inversión sin precedentes de casi 180 millones de dólares.
Con esta iniciativa, el USDA no solo busca combatir la crisis climática, sino también generar nuevas oportunidades de mercado y empleo para pequeñas empresas, agricultores, ganaderos y productores agroforestales en 42 estados y territorios de Estados Unidos, incluyendo Guam, Puerto Rico y las Islas Vírgenes.
Energía limpia y biocombustibles: pilares para una economía sostenible
Según Tom Vilsack, secretario del USDA, “la Administración Biden-Harris está reduciendo costos y brindando a las comunidades rurales la oportunidad histórica de expandir energías limpias y construir una economía que beneficie a las familias trabajadoras y las pequeñas empresas”. Este compromiso incluye inversiones que fortalecen la independencia energética, reducen el impacto del cambio climático y generan ingresos adicionales para los productores, mientras se crean empleos bien remunerados en comunidades rurales.
Hasta la fecha, el USDA ha invertido más de 1.300 millones de dólares en 8.012 proyectos de energía limpia a través del Programa de Energía para América Rural (REAP, por sus siglas en inglés) y más de 287 millones en 345 proyectos del Programa de Incentivos para Infraestructura de Mezclas Superiores (HBIIP). Estas iniciativas han permitido un avance significativo en la disponibilidad de biocombustibles y energías renovables en todo el país.
Proyectos de energía limpia: reduciendo costos y consumo
Como parte de esta ambiciosa estrategia, el USDA destinará 120 millones de dólares en subvenciones REAP para 516 proyectos en 39 estados y territorios. Este programa permite a agricultores y pequeños empresarios implementar mejoras en eficiencia energética y adoptar fuentes renovables como la energía solar y eólica.
Algunos ejemplos destacados incluyen:
- Wolfe Brothers Farms (Pensilvania): Con un subsidio de 500.000 dólares, esta granja familiar instalará un secador de granos más eficiente, ahorrando alrededor de 103.000 dólares anuales y reduciendo su consumo de energía en un 60%.
- Rosewood Dairy Inc. (Wisconsin): Con una inversión similar, esta empresa modernizará su iluminación, logrando un ahorro anual de más de 18.000 dólares y disminuyendo su uso de energía en 238.000 kilovatios-hora.
- Dakota Prairie Pork LLC (Dakota del Sur): Este proyecto instalará un sistema solar de 49.1 kilovatios, generando ahorros energéticos de casi 6.800 dólares al año.
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Biocombustibles: motor de independencia energética
En paralelo, el USDA está invirtiendo 60 millones de dólares en proyectos HBIIP para ampliar la infraestructura de biocombustibles en 24 estados. Esta iniciativa respalda la instalación y actualización de bombas, dispensadores y tanques de almacenamiento para combustibles como el etanol y el biodiesel.
Entre los proyectos más destacados:
- EZ Petroleum (California): Con una subvención de 1,3 millones de dólares, la empresa instalará 30 dispensadores de E85 y siete tanques de etanol en diversas estaciones de servicio. Esto incrementará la distribución de etanol en más de 391.000 galones anuales.
- Mas Fuel Distributors (Florida): Esta empresa recibirá casi 2 millones de dólares para incorporar dispensadores de E15 y E85, así como tanques de etanol, en tres estaciones de servicio. Se estima que este proyecto aumentará las ventas de etanol en casi 2 millones de galones por año.
- Morning Star Station LLC (Iowa): Este emprendimiento instalará dispensadores y tanques para etanol y biodiesel, incrementando la distribución de biocombustibles en más de 438.000 litros anuales.
Impacto rural y equidad climática
Estos esfuerzos también forman parte de la Iniciativa Justice40, que busca garantizar que el 40% de los beneficios provenientes de inversiones climáticas y energéticas fluyan hacia comunidades desfavorecidas y sobrecargadas por la contaminación. Además de fomentar la transición energética, estas acciones fortalecen el tejido económico y social de las áreas rurales.
Un futuro sostenible con energías limpias y biocombustibles
La administración Biden-Harris está transformando el sistema alimentario y energético de Estados Unidos mediante inversiones históricas que promueven mercados más justos, alimentos más saludables y nuevas fuentes de ingreso para los productores. Estas acciones reflejan un compromiso inequívoco con un futuro sostenible y resiliente, donde las energías limpias y los biocombustibles desempeñan un rol protagónico.
