Hyosung, gigante mundial en la fabricación de fibras de spandex,está marcando un hito en la industria textil con una inversión de U$S 1.000 millones (U$S 1 billón en nomenclatura anglosajona) en una nueva planta en Vietnam. Esta instalación pionera utilizará tecnología de fermentación para convertir azúcares en 1,4-butanodiol (BDO), el componente esencial del spandex, pero con un enfoque totalmente ecológico apoyado en recursos biológicos.
El spandex, también conocido como elastano, es una fibra sintética conocida por su excepcional elasticidad y resistencia. Se utiliza ampliamente en la industria textil para crear prendas de vestir ajustadas y cómodas, como calzas, leggings, ropa deportiva y ropa interior. La decisión de Hyosung de adoptar fibras biológicas para la producción de spandex marca un cambio significativo hacia materiales más sostenibles en la moda y el textil.
Además de su aplicación en el spandex, el BDO también se utiliza en la fabricación de polibutileno tereftalato y otros plásticos, lo que subraya su versatilidad y su importancia en diversas industrias. La planta de Hyosung en Vietnam no solo impulsará la capacidad de producción de BDO de origen biológico, sino que también allanará el camino para una producción más limpia y eficiente en la industria del plástico.
El enfoque en las fibras biológicas para la producción spandex no solo reduce la dependencia de los recursos no renovables, como el carbón y el gas natural, sino que también ofrece beneficios ambientales significativos. Genomatica, la empresa detrás de la tecnología de fermentación utilizada por Hyosung, afirma que su proceso de producción de BDO genera un 90% menos de gases de efecto invernadero en comparación con los métodos convencionales.
La iniciativa de Hyosung llega en un momento crucial, cuando la industria textil enfrenta una creciente presión para adoptar prácticas más sostenibles y reducir su impacto ambiental. La reciente decisión de BASF de vender su participación en una planta de BDO basada en carbón en la región china de Xinjiang, citando el exceso de capacidad en el mercado de BDO con alta huella de carbono y los abusos contra el grupo étnico uigur, lo que subraya la necesidad de alternativas más éticas y ecológicas. En 2023, Basf anunció que comprará BDO de base biológica a un joint venture entre Cargill y Helm.
Hyosung planea producir 50.000 toneladas de BDO de base biológica por año para 2026 y 200.000 toneladas anuales para 2035. Las instalaciones proyectadas serían mucho más grandes que otras que utilizan la misma tecnología. Qore, una empresa conjunta entre Cargill y Helm, está construyendo una planta de 300 millones de dólares en Iowa que podrá producir 65.000 toneladas de BDO cuando abra sus puertas en 2026 (Ver https://www.bioeconomia.info/2021/06/11/cargill-y-helm-se-asocian-para-instalar-una-planta-que-convierta-maiz-en-un-precursor-quimico-de-amplia-aplicacion-industrial/). Y Novamont ha estado utilizando esta tecnología desde el 2016 con una capacidad de 30.000 toneladas por año.
La inversión de Hyosung en una planta de BDO en Vietnam marca un hito significativo en la evolución hacia una industria textil más sostenible y responsable. Con un enfoque renovado en las fibras biológicas y una visión hacia un futuro más ecológico, esta iniciativa está sentando las bases para una nueva era en la moda y el textil, donde la innovación y la sostenibilidad van de la mano.