En un reciente informe publicado en colaboración con Synonym, la consultora de negocios Boston Consulting Group (BCG) identifica a las biorrefinerías de próxima generación como el catalizador clave para la próxima ola de productos superiores y sostenibles, proyectando un mercado especializado de hasta U$S 200 mil millones en la próxima década.
El informa titulado ‘Superando la Barrera de Costos en la Biomanufactura’, elaborado por expertos de BCG y miembros de los equipos de mercado de capitales e ingeniería de Synonym, el desarrollo de biorrefinerías estandarizadas y de gran tamaño es fundamental para superar la inercia de costos que actualmente enfrenta el sector. Esto permitirá la producción económica de bioproductos para su adopción masiva, creando así una clase de activos valiosa para los inversores inmobiliarios.
Joshua Lachter, cofundador de Synonym, destaca: «La biología sintética promete, parafraseando el viejo eslogan, una mejor vida y mejores productos a través de la biología. Imagina un mundo donde estos productos sean ubicuos en nuestra vida diaria. Este informe examina cómo ese potencial puede traducirse a las realidades de la producción industrial».
El éxito de la biofabricación se acelerará en un entorno industrial que enfrenta realidades de sostenibilidad cada vez más evidentes. Más de 4.100 de las mayores empresas del mundo han establecido objetivos del Acuerdo de París, y muchas naciones continúan comprometiéndose a alejarse de los métodos de fabricación facilitados por combustibles fósiles.
El informe identifica un mercado incipiente de U$S 200 mil millones, conservadoramente estimado, destinado únicamente a la fermentación de precisión con aplicaciones en los mercados de productos químicos especializados, precursores químicos y alimentos. Además, se destaca que el éxito solo será posible si se escala la capacidad de biofabricación veinte veces su tamaño actual, lo que requiere que los posibles inversores actúen de inmediato.
Jean-François Bobier, Socio de Deep Tech en el Boston Consulting Group y uno de los autores principales del informe, señala: «Nuestros hallazgos ofrecen una claridad fascinante sobre el camino hacia la biofabricación comercial no farmacéutica a corto plazo. Aunque nuestras cifras parecen conservadoras en comparación con algunos análisis, el modelo de biorrefinerías ofrece una ruta clara para una inversión robusta de inmediato».
Joshua Lachter agrega: «Necesitamos que la biología entregue nuestra próxima generación de materiales superiores. Ahora es el momento para que los inversores siembren la infraestructura necesaria para este futuro, un futuro que promete mejores productos que también sean mejores para nuestro planeta y nuestra salud. Nuestro objetivo es ayudar a las empresas a comprender cómo producir y dónde producir, y lograr que estos bioproductos lleguen a las cadenas de suministro de todo el mundo».
La bioeconomía está en un punto crítico de transformación y se perfila como el camino hacia un futuro más sostenible y próspero con la biofabricación a gran escala.