Repsol y New Holland se han unido en una colaboración para evaluar el uso de combustibles renovables en maquinaria agrícola, en un proyecto que se llevará a cabo en España durante un año. La iniciativa fue presentada en Campus New Holland, la finca que la marca tiene en Segovia y que sirve como banco de pruebas y centro de formación desde 2006.
El objetivo de esta colaboración es demostrar que los combustibles renovables son una opción viable y efectiva para reducir las emisiones del sector agrícola. Durante cuatro meses, un equipo de científicos de Repsol, New Holland y la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) evaluará el comportamiento de los combustibles renovables en la maquinaria agrícola en condiciones reales. Se medirán parámetros como el rendimiento, la potencia y el consumo utilizando sistemas de telemetría incorporados en los tractores de New Holland, y las emisiones se obtendrán gracias a equipos específicos proporcionados por la UCLM. Los datos se almacenarán y analizarán para obtener conclusiones comparativas entre el combustible renovable y el combustible convencional (gasóleo B).
Carlos Suárez, Director de Movilidad de Repsol, señaló que «Este acuerdo con New Holland refuerza la apuesta de Repsol por los combustibles renovables y su compromiso con el sector agrícola. Los combustibles renovables son una solución que reduce de manera inmediata las emisiones netas de CO2 y son compatibles con la maquinaria y las infraestructuras de distribución y repostaje existentes, sin necesidad de realizar modificaciones. Además, amplían las opciones de tecnologías sostenibles para la movilidad, lo que permite a los usuarios elegir la que mejor se adapte a sus necesidades».
Francesco Zazzetta, Director de New Holland Iberia, destacó la importancia de buscar alternativas en el ámbito de la maquinaria agrícola, donde New Holland ha sido pionera en soluciones como el tractor T6 Methane Power, propulsado por biometano, o la miniexcavadora eléctrica E15X. «Este acuerdo con Repsol permite abrir una nueva opción con el objetivo de tener una gama completa de alternativas con emisiones netas cero lo antes posible».
Repsol, una compañía multienergética que está inmersa en un proceso de transformación, tiene en la economía circular uno de sus pilares principales para alcanzar las cero emisiones netas en 2050. Fabrica combustibles renovables utilizando diversos tipos de residuos orgánicos del sector agroalimentario y forestal, así como aceites usados, entre otros.
En enero pasado, Repsol y ASAJA firmaron un acuerdo de colaboración para buscar soluciones que mejoren la gestión de subproductos de la agricultura y la ganadería en entornos rurales y poco poblados. Repsol analizará el potencial de estos residuos y subproductos para incorporarlos a la fabricación de combustibles renovables y materiales circulares en sus complejos industriales, impulsando así la economía circular y generando nuevas oportunidades en el sector primario.
Esta iniciativa busca, por un lado, promover una gestión eficiente de los residuos agrícolas y ganaderos a través del desarrollo de la economía circular en España, creando nuevas cadenas de valor que inducen empleo, especialmente en zonas rurales. Y por otro, los combustibles renovables ofrecen, de manera inmediata, una solución para aquellos sectores, territorios y consumidores que no tienen otra opción a su alcance a corto o medio plazo, como puede ocurrir en el sector agrícola. Además, la producción de combustibles a partir de residuos refuerza la independencia energética de cada país, en este caso España.
Todos los combustibles renovables que produce Repsol están certificados y auditados para asegurar el cumplimiento de los parámetros de sostenibilidad y reducción de emisiones de CO2 definidos en la directiva de renovables (RED) y la trazabilidad de las materias primas y residuos que se incorporan a la cadena productiva, desde su origen hasta el producto final. Así se garantiza la sostenibilidad de todo el proceso.
Combustibles cero emisiones netas
Repsol se encuentra en la vanguardia de la producción de combustibles renovables en España, con el objetivo de alcanzar las cero emisiones netas para 2050. Los combustibles renovables, producidos a partir de residuos de biomasa y combustibles sintéticos, son una alternativa complementaria a la electrificación en el transporte por carretera y una opción clave para descarbonizar el sector marítimo y aéreo.
Lectura sugerida
Repsol ha estado fabricando y comercializando biocombustibles durante más de dos décadas, y desde 2019 ha incorporado residuos de biomasa en su producción. Actualmente, los combustibles renovables de Repsol están presentes en todas las estaciones de servicio, cumpliendo con la legislación vigente de contenido de más del 10% en los combustibles vendidos.
Con el objetivo de liderar el mercado de los combustibles renovables, Repsol tiene prevista la producción de 2 millones de toneladas en España para 2030. Para lograrlo, este año pondrá en marcha la primera planta de biocombustibles avanzados en Cartagena, y en 2025 está prevista la puesta en marcha de una planta demostrativa de combustibles sintéticos en Bilbao, en colaboración con Aramco, donde se está desarrollando la tecnología necesaria.
El uso de combustibles renovables permite reducir la huella de carbono y contribuir a la lucha contra el cambio climático, sin necesidad de realizar modificaciones en los motores o infraestructuras de distribución y repostaje existentes. Repsol se posiciona como líder en esta área, impulsando la transición hacia una energía más sostenible y apostando por la innovación y el desarrollo de tecnologías avanzadas en el sector de los combustibles renovables.