En el mundo de la bioeconomía, el Consejo de Granos de Estados Unidos (USGC, por sus siglas en inglés) se ha consolidado como un actor clave para desarrollar mercados de exportación de granos y sus co-productos. Sin embargo, su trabajo va más allá de los granos: el organismo ha adoptado una estrategia creativa y ambiciosa para posicionar al etanol como un combustible esencial en la transición hacia una energía limpia y sostenible.
La visión del USGC: etanol como energía verde
Con presencia permanente en 13 mercados clave y programas en más de 50 países, el USGC ha demostrado una adaptabilidad notable al trabajar con culturas, regulaciones y mercados diversos. Su última iniciativa en Japón marca un punto de inflexión: el gobierno japonés anunció que la gasolina del país será mezclada con un 10% de etanol (E10) para 2030 y un 20% (E20) para 2040. Este plan no solo posiciona al etanol como una solución climática, sino también abre un mercado con un potencial inmenso para el biocombustible estadounidense.
Estados Unidos es, por lejos, el mayor productor y exportador del mundo de maíz y de bioetanol derivado de maíz. Más del 40% del maíz producido en el país se destina a la fabricación de etanol y burlanda (DDGs), un co-producto altamente valorado en la alimentación animal. La expansión de mercados internacionales para el etanol no solo es una estrategia comercial clave, sino también una necesidad para aprovechar al máximo la capacidad productiva del sector.
Tommy Hamamoto, director del USGC en Japón, explicó: “Queremos apoyar esta política compartiendo con el público japonés los beneficios del etanol como fuente de energía verde”. Este compromiso se materializó recientemente con una visita de periodistas japoneses a los Estados Unidos, diseñada específicamente para educar a los medios sobre las ventajas del etanol. La prensa, como aliado clave para informar y convencer a la opinión pública, desempeña un rol fundamental en la adopción de políticas sostenibles.
Una experiencia inmersiva: de Illinois a Washington D.C.
El recorrido comenzó en Illinois, donde los periodistas se reunieron con profesores universitarios, minoristas de gasolina y representantes de Illinois Corn, una organización clave en la producción de maíz y etanol. Durante estas visitas, los periodistas exploraron el papel del etanol en la mitigación del calentamiento global y en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
En los campos de maíz y las plantas de producción de etanol, los visitantes conocieron de primera mano cómo este biocombustible se produce y distribuye. Además, tuvieron la oportunidad de explorar aplicaciones emergentes como el combustible sostenible para la aviación, un sector que promete revolucionar el transporte global.
Estados Unidos traza un ambicioso plan para impulsar los biocombustibles de aviación
La travesía continuó en Washington D.C., donde los periodistas participaron en discusiones con representantes de la National Corn Growers Association, Growth Energy y Renewable Fuels Association. Estas reuniones se centraron en las oportunidades del etanol en Japón y las políticas necesarias para fortalecer la relación comercial entre ambos países. Además, en un diálogo con miembros del Congreso, se discutió cómo las políticas públicas pueden potenciar aún más el impacto del etanol como herramienta climática.
Etanol y sostenibilidad: una apuesta a largo plazo
El trabajo del USGC trasciende la apertura de mercados. En cada paso, el Consejo enfatiza los beneficios ambientales y económicos del etanol. Este biocombustible no solo reduce significativamente las emisiones de carbono al sustituir combustibles fósiles, sino que también impulsa la economía rural en los Estados Unidos al aumentar la demanda de maíz y sus co-productos.
Hamamoto resaltó: “Estados Unidos y Japón tienen una relación comercial sólida en el comercio de maíz. Nuestro objetivo es construir una relación igualmente fuerte en el ámbito del etanol”. Este compromiso no solo refuerza los lazos bilaterales, sino que también posiciona al etanol como un protagonista en la transición hacia economías bajas en carbono.
El impacto global del USGC
El enfoque del USGC en la educación y el desarrollo de mercados tiene un impacto tangible en la adopción global del etanol. Al compartir conocimientos y experiencias, el Consejo contribuye a superar barreras regulatorias, técnicas y culturales que limitan la adopción de este biocombustible.
Japón no es el único mercado en la mira. El USGC también trabaja activamente en otros países de Asia, Europa y América Latina para promover el uso de etanol. A través de un enfoque colaborativo y basado en la evidencia, el Consejo está impulsando una revolución global en la forma en que entendemos y utilizamos la energía.
Exportar conocimiento, innovación y sostenibilidad
El Consejo de Granos de Estados Unidos no solo exporta granos, sino también conocimiento, innovación y sostenibilidad. Su trabajo para expandir el uso del etanol es un ejemplo claro de cómo la colaboración internacional puede transformar mercados y generar soluciones sostenibles a los desafíos energéticos y climáticos del siglo XXI.
Con iniciativas como la implementada en Japón, el USGC está demostrando que el etanol no es solo un combustible, sino una herramienta poderosa para construir un futuro más limpio y sustentable.