sábado, enero 25, 2025
 

Los gigantes del petróleo apuestan a los biocombustibles: ¿un paso decisivo hacia la descarbonización?

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La transición energética global está marcando un giro histórico en la industria de los combustibles. Los principales actores del sector petrolero, como BP, Chevron, Shell, TotalEnergies, ExxonMobil y Eni, están destinando miles de millones de dólares a proyectos de biocombustibles como parte de sus estrategias para descarbonizar. Según un reciente informe de Rystad Energy, estas empresas han anunciado 43 iniciativas relacionadas con biocombustibles, con planes que abarcan hasta 2030. Estas apuestas buscan satisfacer una creciente demanda global de combustibles sostenibles, especialmente en sectores como la aviación, el transporte pesado y la navegación marítima.

Un enfoque estratégico en biocombustibles avanzados

Entre los diferentes tipos de biocombustibles, los hidrocarburos vegetales tratados con hidrógeno (HVO, por sus siglas en inglés) y el combustible de aviación sostenible (SAF, por sus siglas en inglés) lideran las inversiones, representando casi el 90% de la producción proyectada. Estos combustibles, conocidos como «drop-in», pueden integrarse fácilmente en las infraestructuras existentes sin necesidad de modificaciones significativas, posicionándolos como una solución inmediata para reducir emisiones.

Con estas tecnologías, las petroleras están desarrollando 31 plantas completamente nuevas, seis proyectos de co-procesamiento —que combinan materias primas bio con el refinado de petróleo tradicional— y seis conversiones totales de refinerías. El co-procesamiento, en particular, en algunos países como Brasil, no es considerado un biocombustible elegible para cumplir los mandatos de corte.

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Chevron, BP y Eni: líderes en capacidad y ejecución

Entre los proyectos más destacados se encuentra el de Chevron en Geismar (EE.UU), que añadirá 22.000 barriles diarios (bpd) de capacidad de biocombustibles, consolidándolo como el mayor desarrollo de nueva planta. Su refinería en El Segundo (EE.UU), convertida en una instalación renovable, ya produce 10.000 bpd, marcando otro avance significativo. Por su parte, la refinería Gela de Eni en Italia, reconvertida completamente, apunta a 16.000 bpd de HVO y SAF, subrayando el creciente peso de estas tecnologías en Europa.

Los gigantes del petróleo apuestan a los biocombustibles: ¿un paso decisivo hacia la descarbonización?
Capacidad instalada y planificada de producción de biocombustibles vs objetivos 2030, en miles de barriles por día. Fuente Rystad Energy.

BP se posiciona como el gigante con mayor capacidad anunciada, con planes que alcanzan los 104.000 bpd de bioetanol, HVO y SAF. Este liderazgo se consolidó tras la adquisición de Bunge Bioenergia, uno de los principales productores brasileños de biocombustibles, que permitió a BP superar su meta de 50.000 bpd antes de 2025 y trazarse un nuevo objetivo de 100.000 bpd para 2030.

Los gigantes del petróleo apuestan a los biocombustibles: ¿un paso decisivo hacia la descarbonización?
Capacidad instalada de producción de biocombustibles anunciada por los grandes petroleros distribuida por producto, en miles de barriles por día. Fuente Rystad Energy.

Un futuro impulsado por residuos

TotalEnergies, por su parte, apuesta a una estrategia centrada en la sostenibilidad, buscando que el 75% de su producción provenga de residuos y biomasa para finales de 2024. Su enfoque en aceites usados y grasas animales no solo evita conflictos por el uso de tierras, sino que también contribuye al modelo de economía circular. ExxonMobil no se queda atrás, con su refinería Strathcona programada para iniciar la producción de 20,000 bpd el próximo año y 12 proyectos adicionales en camino para alcanzar los 200,000 bpd en 2030.

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Desafíos y perspectivas hacia 2030

Aunque estas iniciativas representan un avance significativo, el camino hacia los objetivos de descarbonización de 2030 no está exento de desafíos. Retrasos en proyectos, fluctuaciones en las políticas regulatorias y la competencia por materias primas sostenibles pueden ralentizar el progreso. Sin embargo, la creciente presión legislativa, como la iniciativa europea ReFuel EU y los mandatos en Asia Pacífico, están impulsando a las petroleras a acelerar sus inversiones.

De acuerdo con Rystad Energy, los biocombustibles han pasado de ser una alternativa potencial a convertirse en un componente clave de las estrategias globales de descarbonización. La combinación de tecnología, innovación y economía circular promete transformar al sector energético en los próximos años, marcando un punto de inflexión en la transición hacia un futuro más sostenible.

 
 
 

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